Hoy hablamos sobre el método kiss en marketing ¿sabes los que es?
Muchas veces pensamos que para hacer marketing hay que complicarse con herramientas, plugins, anuncios, automatizaciones y mil historias más.
Que no te digo yo que no.
Que puede que todas esas herramientas sean necesarias y te faciliten el trabajo.
Seguramente sí.
Pero aquí la cuestión es saber si eso es lo más simple que puedes usar para realizar esa tarea.
Es decir, que todas las herramientas que utilices sean la forma más simple y sencilla de llegar al fin que necesitas.
Y de esto va el método Kiss, de buscar la forma más sencilla.
Índice del artículo
Bueno, pero ¿qué es el método Kiss?
KISS es el acrónimo de Keep it simple, stupid.
Así, como lo lees.
En español se suele traducir como Mantenlo simple, estúpido.
Hay una versión menos agresiva que es: Keep it short and simple (Mantenlo breve y simple).
Tú eres libre de elegir cualquiera de ellas, no quiero entrometerme en eso.
Lo que te tiene que quedar claro es que perseguimos la simplicidad.
Según la wikipedia: «El principio KISS establece que la mayoría de sistemas funcionan mejor si se mantienen simples que si se hacen complejos; por ello, la simplicidad debe ser mantenida como un objetivo clave del diseño, y cualquier complejidad accidental debe ser evitada».
El método KISS se tiene en cuenta sobre todo en el campo del diseño, aunque podemos extenderlo a muchos ámbitos dentro del marketing e incluso en nuestra vida diaria.
Se ha convertido más en una filosofía que en un método.
Vamos a ver unos ejemplos y reconocerás porqué aplicando el método KISS vas a triunfar.
Método KISS en diseño
Cuando hablamos de diseño y de simplicidad, lo primero que nos viene a la cabeza es:
APPLE

De hecho, el Director creativo de Apple, Ken Segall, quién estuvo detrás de las grandes campañas de la marca e ideó la célebre «i» que antecede a todos los productos Apple, escribió estos libros sobre la filosofía de la simplicidad de Apple.

IKEA


Estas marcas han buscado solucionar un problema eliminando cualquier complejidad, sobre todo en su diseño, y extendiéndose a la imagen de marca (procesos, marketing, filosofía, etc).
Método Kiss en marketing
Si ya hemos hablado de que el método Kiss lo puedes aplicar en el diseño de tu marca, en el marketing también.
Y es más que recomendable inclinarse hacia lo simple y sencillo que hacia lo complejo.
Una página web con un diseño simple, orientado a una buena experiencia de usuario. Que utilice recursos como plugins eficaces, que hagan una web ligera y que cargue rápido.
Si te puedes apañar con 5 secciones, ¿para qué crear 25?.
Unos textos que describan en pocas palabras, en lenguaje claro, dirigidos al usuario.
Llamadas a la acción bien claras, que no dejen lugar a duda.
Acertar con las frases adecuadas con las mínimas palabras posibles no es tan fácil como parece. A veces, se escriben párrafos llenos de palabras que se podrían simplificar en una frase.
Haz la prueba cada vez que escribas para un anuncio, para tu web o incluso para los carteles que pones en tu negocio local.
En las redes sociales, también aplica el método Kiss.
Los usuarios consumen las redes sociales de forma compulsiva y poco controlada. Así que, los post han de ser de lectura simple y sencilla.
Facilita a tus seguidores la tarea de entretenerse y aprender contigo.
Twitter es un gran ejemplo de método Kiss, te obliga a reducir tus post a 280 caracteres…eso sí que es simplificar.
En las estrategias de marketing que utilices, apuesta por lo más sencillo.
Planificar el calendario de contenidos, un lanzamiento, un embudo de ventas, una secuencia de email marketing….no te enrolles.
Enfócate en una estrategia clara, simple y bien dirigida a tus posibles clientes. Prueba e itera.
A veces, querer hacer complejos sistemas es lo más contraproducente.
Método Kiss en tu vida
A lo largo de tu vida , ¿cuántas veces te han dicho eso de «menos es más»?
Esa pequeña frase encierra mucha sabiduría que viene a resumir lo que es el método Kiss.
Sin embargo, podemos confundirlo con hacer las cosas sencillas sin atender otras posibilidades. Y no es así, se trata de que entre dos alternativas en igualdad de condiciones, vamos a elegir la forma más simple de llevarlo a cabo.
A lo largo de la historia, algunos autores y filósofos se han alineado con la idea de lo simple:
- Einstein: «Todo debería hacerse tan simple como sea posible, pero no más simple».
- Leonardo Da Vinci: «La simplicidad es la última sofisticación»
- Antoine de Saint Exupery: «La perfección se alcanza, no cuando no hay nada más que añadir, ni no cuando no hay nada más que quitar».
- La Navaja de Ockham: Es un principio de economía que dice que «en igualdad de condiciones, la explicación más sencilla suele ser la más probable».
En conclusión, si alguna vez te encuentras con un texto, una web o un diseño que te parece complicado…acuérdate de esto: «Mantenlo simple, estúpido».
PD.- Si necesitas una web con unos textos que vendan puedes contactar con nosotras que te ayudamos
Deja una respuesta